Hostales en Havana
38 Hostales y otros alojamientos en Havana, CubaAcerca de Havana
Viajar a La Habana es una de esas experiencias que hay que vivir. De carácter innegablemente excéntrico y con una famosa historia a sus espaldas, la capital de Cuba se ha convertido en todo un icono. Las fortalezas, las catedrales y los monumentos ilustran a la perfección su pasado comunista, pero cualquiera que venga aquí comprenderá que su gente es la que hace única a esta ciudad caribeña. Aquí el baile es un modo de vida, así que prepárate para explorarla a golpe de cadera y al son de la salsa, la rumba y el chachachá.
Encontrarás hostels en La Habana económicos y céntricos. Son la mejor manera de ahorrar un poco y de empaparte de la cultura cubana. La mayoría cuentan con dormitorios, pero también encontrarás habitaciones privadas, algunas con balcón. Lo más importante es la mayoría de hostels en La Habana que disponen de muchos espacios en los que socializar con otros viajeros, como terrazas, bares y mesas de billar. También podrás apuntarte a clases de baile, tomar una copa en la azotea y aprovechar que están en edificios muy fotogénicos para llenar tu Instagram de fotos. ¿Has encontrado ya tu hostel en La Habana?
Alójate cerca de La Habana Vieja para encontrar la mejor selección de tiendas, restaurantes, bares y ocio nocturno. También tendrás los museos y las cuatro plazas principales de la ciudad a mano. ¿Eres creativo? Deambularás por las mismas calles que pisó Ernest Hemingway, así que ¡igual te inspiras! La calle Obispo es una de las más importantes de la zona y en ella podrás adquirir los productos básicos que puedas necesitar. Quedarse cerca del paseo de Martí también es una buena idea: te cruzarás con artistas y vendedores, y disfrutarás de locales para a comer y beber algo.
Profundizar en la historia de la capital cubana es casi obligatorio si viajas hasta aquí. Explorar lugares como La Habana Vieja, el castillo del Morro y el Museo de la Revolución te permitirán vislumbrar su complejo pasado. Existen muchas calles por las que merece la pena pasear para vivir una auténtica experiencia cubana, empezando por la de San Rafael. Tampoco te puedes perder el puerto, ya que fue muy importante durante la época española. Cuando hayas terminado de recorrerlo todo, no pasa nada si dedicas algo de tiempo a relajarte en alguna playa, ¡te lo habrás ganado!
Moverse por La Habana tiene su cosa. Si no te apetece caminar o el sitio al que vas está demasiado lejos, lo más recomendable es tomar un taxi. Los autobuses son prácticos, pero a veces están hasta arriba de gente, hace calor y su funcionamiento es confuso. Los colectivos son taxis que recorren distancias largas y hacen una ruta fija. Salen una vez que están llenos, así que prepárate para ir apretadito, pero probablemente serán más rápidos y más baratos que un bus. Los bicitaxis son bastante habituales, pero pueden ser un poco caros, así que pregunta cuánto cuestan antes de tomar uno. Por último, para desplazarte a otra ciudad o región, puedes tomar un camión (sí, has leído bien, ¡un camión!) en las paradas de buses provinciales o municipales habilitadas para ello.