Hostales en Lijiang

Acerca de Lijiang

Las casitas tradicionales de madera, las laberínticas calles de adoquines y los idílicos canales, que abastecen de agua a los lugareños, convierten a la ciudad china de Lijiang en una auténtica belleza digna de postal. Con un fondo de montañas de picos nevados e imponentes lagos, es el lugar ideal para una inmersión en plena naturaleza. En su centro histórico, reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, descubrirás los cientos de años de historia que hacen tan especial a esta localidad, con una gran diversidad étnica. La tranquilidad que transmiten sus paisajes y arquitectura convive con una animada vida cultural moderna tanto de día como de noche.

Relájate en Lijiang en un hostel ubicado en lo alto de una colina, o quédate en el centro para descubrir sus joyas históricas y sus bares. Muchos alojamientos cuentan con jardines, donde podrás tomarte algo mientras compartes anécdotas con otros mochileros, y algunos establecimientos tienen también bares. Si vas a ir de ruta de senderismo, probablemente te interesen los hostels en Lijiang que incluyen el desayuno para empezar el día con fuerzas. Opta por los lugares con wifi gratuito para actualizar tu estado en redes sociales, incluso desde estas recónditas montañas.

El casco histórico de Lijiang es famoso por su arquitectura única, que refleja la cultura del pueblo naxi, con entradas en forma de arco muy bien conservadas, patios interiores ajardinados y muros de barro cocido. Si te gusta madrugar podrás disfrutar de esta parte de la ciudad sin demasiado alboroto. Si, por el contrario, eres más de trasnochar, aquí encontrarás los bares más animados. Para una excursión tranquila, visita el pueblo de Baisha para maravillarte con sus murales del siglo XV, o al antiguo pueblo de Shuhe para contemplar los primeros asentamientos de los ancestros del pueblo naxi y el puente de Qinglong.

Cuando pasees por el casco histórico de Lijiang, te sorprenderá la armonía existente entre la cultura moderna y antigua de la ciudad. ¿Quieres conocer el máximo esplendor del reino de los naxi? Entonces no te puedes perder el Palacio Mu. Aunque la residencia original quedó destruida, esta reconstrucción conseguirá transportarte casi literalmente al siglo XIII. Si anhelas un momento zen en la naturaleza, reserva una jornada de tu viaje para explorar el estanque del Dragón Negro y el templo de Longshen. La montaña nevada del Dragón de Jade se alza detrás de la ciudad y está considerada como un lugar sagrado para los naxi. Si lo tuyo es esquiar, demuestra tus habilidades sobre la nieve en sus pistas con 5596 metros de altura.

El Aeropuerto Internacional de Lijiang Sanyi es el más cercano a la ciudad. Con varios vuelos nacionales al día, muchos mochileros suelen hacer escala en Kunming primero. Para llegar al centro de Lijiang desde el aeropuerto, puedes ir en tren hasta la estación de trenes de Lijiang y luego en un bus de 70 minutos, o en un bus de larga distancia que lleva unas 8 horas. Una vez en la ciudad, lo mejor es moverse en bici, aunque también hay buses locales.